Esto es lo que se pide. Siempre ha sido esto. Pelear, nocejar en el empeño a pesar de las dificultades, obligar al otro equipo a que tegane y demuestre que es mejor que tú, si es que es capaz. Por eso la afición deFuenlabrada nunca pitará al equipo tras una derrota si se ha respetado todo loanterior. Así fue ayer, cuando el público despidió al equipo con una granovación una vez escuchado el bocinazo final. Habíamos perdido, sí, pero elesfuerzo del primer al último minuto había que premiarlo.

La clave en adelante es mantener esta línea de intensidad. Plantarseel viernes en San Sebastián y que la motivación sea la misma tengamos enfrentea Jon Cortaberría o a Juan Carlos Navarro. Porque de lo contrario nos pasaránpor encima. Y lo mismo se puede aplicar a los choques contra Unicaja, HerbalifeGran Canaria, Real Madrid, etcétera, etcétera.  

Se antoja muy valioso sumar esta semana. En apenas ocho díashabremos jugado dos partidos más, fundamentales para definir en qué zona de latabla nos moveremos en el futuro. Por eso es buen indicio lo que hemos vistoúltimamente, tanto contra el Manresa como contra el Barcelona. Las citas estánahí: el viernes 27 en Donosti (20:00 horas) y el lunes 30 en casa ante elUnicaja (20:30 horas). A ver si las uvas nos saben dulces.

Departamento de Comunicación del Baloncesto Fuenlabrada.