Queremos pasar del “¡ay, copón!” con el que titulábamos el pasado domingo la crónica tras la décima victoria al “hay copón”. Porque por cerca que estemos, lo cierto es que aún no tenemos asegurada la clasificación para la Copa del Rey que se jugará del 15 al 18 de febrero en Las Palmas.

Para lograr el pase la cuenta más sencilla es ganar un partido más. Con ese triunfo alcanzaríamos las 11 victorias y entonces sí matemáticamente ya seríamos equipo de Copa. Incluso perdiendo los cuatro partidos que restan tendríamos opciones de clasificación, aunque en tal caso habría que estar pendientes de lo que hicieran otros muchos equipos.

Y es que a falta de cuatro jornadas, que son cinco para algunos rivales que aplazaron el partido del pasado fin de semana, las variables son numerosas. Podemos dibujar algunas líneas maestras, positivas y negativas:

En el lado menos optimista tenemos el tremendo calendario que nos corresponde de aquí a la decimoséptima jornada. Hemos de visitar a tres de los cuatro primeros (el otro somos nosotros ;). Barcelona Lassa, Real Madrid y Valencia Basket. El único partido en casa que nos resta es frente al UCAM Murcia, el 7 de enero a las 12:30 horas.

También jugaría en nuestra contra la posibilidad de que el Herbalife Gran Canaria quede de la octava posición hacia abajo. Eso obligaría a estar entre los siete primeros ya que los amarillos tienen su presencia asegurada como anfitriones.

Los precedentes podemos tomarlos por el lado bueno o por el malo. Casi casi siempre los diez triunfos que ahora tenemos han sido válidos para entrar en la Copa. Pero hay algún precedente de lo contrario como aquel de 2006 en el que precisamente nosotros nos quedamos fuera con diez victorias. Sí, aquella Copa del Rey organizada y pagada por la Comunidad de Madrid con el dinero de los impuestos de todos los madrileños en la que Comunidad y ACB dejaron fuera al mejor equipo madrileño, el Fuenlabrada, para hacerle hueco a otro que había quedado por debajo, el Real Madrid.

Si vemos el vaso medio lleno, nos tenemos que sumar al carro que empujó Néstor García en la última rueda de prensa. Cuando le preguntaron por la Copa, nuestro entrenador dijo no controlar mucho de matemáticas y que lo más importante es que el equipo iba a seguir trabajando para seguir sumando victorias. Pues eso, una más y la Copa estará segura.

Además, esta fantástica dinámica que nos tiene en segunda posición con diez triunfos en trece jornadas prácticamente nos ha asegurado ya la permanencia. E incluso nos deja en disposición de mirar a largo plazo con la esperanza de que podamos luchar por entrar en los playoffs por el título la final de la liga regular.

Y puesto a soñar, ¿por qué no echar cuentas para terminar la primera vuelta entre los cuatro primeros y ser cabeza de serie en el sorteo copero? Para eso habría que hacer la gesta de ganar en Barcelona, Madrid o Valencia. Y asegurar el triunfo en casa contra el UCAM Murcia, cuestión esta que no será ni mucho menos sencilla.

Elucubraciones, cuentas, sueños. Luchamos por la quinta participación en la Copa de nuestra historia, sería la segunda en tres temporadas.

Departamento de Comunicación del Montakit Fuenlabrada.