“Nos llevamos dos lecturas muy positivas: la primera es que hemos sido un equipo muy serio y solvente. La segunda es que todos hemos aportado aspectos positivos a la victoria”. Estas palabras de Toni Ten tras la finalización del encuentro son la piedra angular de la temporada del Fuenla. Si repetimos en más partidos estas dos condiciones (solvencia y aportación colectiva) sumaremos muchas victorias.
Unas palabras que tuvieron la plasmación más perfecta sobre la pista en el tercer cuarto. Fueron diez minutos en los que todo salió como se pretende. Férreos en defensa. Acertados y generosos en ataque. En término extremo. Tanto que firmamos un parcial de 8 – 33 en esos diez minutos que finiquitó el partido.
Antes de ese excelso tercer periodo, el Fuenlabrada ya había apuntado buenas maneras. Esta vez sí, con una entrada al partido seria, muy centrados y solidarios en el juego. Y producto de ello, mandones en el marcador. Las rentas fueron creciendo paulatinamente hasta alcanzar un más que interesante 25 – 38 mediado el segundo cuarto. Sin embargo, algunos errores no forzados de los nuestros y un arreón de los locales estrecharon el marcador justo antes del descanso (37 – 40).
Ya hemos apuntado antes que tras el paso por vestuarios fuimos un vendaval. Firmamos un parcial de 0-20 que puso en el luminoso del pabellón melillense un contundente 37 – 60. De ahí hasta el final, el partido fue un intercambio de cestas que en nada varió la suerte del mismo.
Un vistazo a las estadísticas respalda la solvencia que subrayaba Toni Ten: buenos porcentajes de lanzamiento desde todas las distancias, producto de una buena circulación de balón que nos proveía de óptimas posiciones de tiro. Las 22 asistencias así lo avalan. Superioridad en el rebote (29 – 36). Buen equilibrio entre pérdidas de balón (9) y recuperaciones (8).
Y con todos los jugadores sumando: seis de ellos se fueron por encima de los 10 tantos de valoración. Todos anotaron, excepto Rodrigo Díaz que jugó medio minuto en el que tuvo tiempo de dar una bonita asistencia. Nueve de ellos dieron al menos una asistencia a los compañeros. Y también fueron nueve los que capturaron al menos dos rebotes.
En fin, una victoria coral y contundente que vale para estrenar nuestro casillero de triunfos. Una gran alegría que sirve para afianzar el trabajo hecho desde finales de agosto y que nos da impulso para todo lo que viene.
Departamento de Comunicación del Baloncesto Fuenlabrada.
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