Dosdatos sirven para sintetizar lo que fue el encuentro de anoche en Pucela:establecimos nuestro tope histórico de anotación a domicilio en la ACB con 107puntos y logramos nuestra victoria más holgada fuera de casa con el +24 quereflejaba el marcador tras los 40 minutos. Con el jolgorio merecido locelebraron los seguidores fuenlabreños que en número amplísimo se dejaron notardurante toda la tarde en el pabellón vallisoletano. Ya desdeel primer instante se vio la superioridad visitante con un pletórico Dani Péreza los mandos para establecer un 2 – 12 tras tres minutos de juego que obligó aRicard Casas a pedir tiempo muerto. Pero poco cambió la dinámica porque cincominutos más tarde la renta era ya de 16 puntos (11 – 27). Baloncesto sencilloen ataque y defensa correcta en el perímetro que contaba con el seguro de vidade Moussa Diagne, inmenso en el rebote, la intimidación y el barrido, esaacción en la que se está especializando, que tanto fastidia al rival y queconsiste en palmear el balón hacia fuera una vez ha tocado el aro para evitarla canasta. Al menos cuatro veces lo hizo con lo que restó no menos de ochopuntos a los vallisoletanos. Sinembargo, los locales también tuvieron su momento de inspiración. Fue en elsegundo cuarto con sus transiciones rápidas y tiros exteriores, con Rowe,Andjusic y Johnson al mando de las operaciones. Así se pusieron a tiro depiedra (30 – 34), pero entonces llegaron las dos canastas más importantes delpartido, sendos triples de Javi Vega en menos de un minuto que desactivaron alPisuerga y echaron por tierra el planteamiento zonal de los morados. Al descanso,las aguas habían vuelto a su cauce: 41 – 53. Al tantemido tercer cuarto entramos esta vez mucho más enchufados. La idea era nodejar entrar en partido de nuevo al CB Valladolid, anular cualquier esperanzade remontada rival. Entre Dani Pérez, Moussa Diagne y Andy Panko lograron lostangibles puntos y rebotes que plasmaban en el marcador el buen trabajocolectivo para poner el 43 – 60 en el minuto 23. Pronto sesumó también un Feldeine que había estado frío en la primera parte pero que secalentó tras el descanso. Con el dominicano a tono la renta rebasó por vezprimera la veintena (49 – 71). Para entonces el jolgorio ya se había instaladoen el fondo de la afición fuenlabreña dominadora del ambiente en las gradastanto como el equipo en la pista. Justo esreconocer que los locales siempre lo intentaron y sólo se dejaron llevar en elminuto final. Su última intentona llegó en el arranque del cuarto periodo yaque el 67 – 80 con ocho minutos de juego les otorgaba aún alguna opción, peroésta quedó rápidamente aniquilada con el minuto mágico dominicano con tresexplosiones definitivas en forma de mate de Feldeine, tapón de Vargas y triplede James. Partido sentenciado. Para elfinal quedaron los contraataques de Panko con un par de acciones “de palomero”,las ovaciones en los cambios, la celebración por alcanzar el centenar de puntosy la segunda aparición en la Liga Endesa de Chema González que de nuevoaprovechó su tiempo con un rebote, dos puntos y una asistencia. Fiesta completapara equipo y aficionados que debe tener su continuación en las dos próximas jornadas,ambas en casa ante Laboral Kutxa (domingo 26, 18:00 h) y UCAM Murcia (sábado 1de febrero, 19:30 h). Será más difícil, pero podemos hacerlo. Departamentode Comunicación del Baloncesto Fuenlabrada. Imagen: ACHPhoto
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