Más vale que nos aprendamos mejor el manual de instrucciones de la LEB porque el primer punto del índice se nos ha atragantado pero bien. El partido se nos hizo bola desde el primer momento, salimos al mismo muy por debajo de lo deseado. Tanto que nos vimos con un 2-15 en los primeros minutos.

Y no es ya que tú estés por debajo de lo esperado, es que además el rival se impulsa porque se siente cómodo. Se ve capaz de dar su mejor versión. Tanto que anota 30 puntos en el primer cuarto (17-30).

Reaccionamos en cuanto se inició el segundo periodo. Cerramos nuestro aro incrementando la intensidad y la coordinación defensiva. Y en consonancia nos encontramos más cómodos en ataque. Llegamos a nivelar el marcador (36-37), empero en las últimas acciones antes del descanso volvimos a desinflarnos en la misma medida en que tomaba aire el rival. 36–44 al intermedio.

Prolongamos los malos momentos tras la reanudación hasta completar un parcial que disparaba de nuevo a los cántabros: 36-50. Y vuelta a remar río arriba. 

Paso a paso, encontramos otra vez la estabilidad en el juego. No fue una reacción fulgurante, sino un picar piedra hasta acercarnos al objetivo. Así, mediado ya el último cuarto miramos de nuevo a la cara al rival en el marcador.

Entonces, con el partido prácticamente empatado y con el pabellón encendido - el público fue el actor más constante empujando de principio a fin - cometimos algunos errores en defensa entrelazados con auténticos canastones de mérito del Grupo Alega Cantabria. En total fueron seis ataques consecutivos de los visitantes anotando para reabrir brecha (65-72).

Aún así no nos rendimos y volvimos a recobrar esperanzas con el 70-72 ya entrando en el último minuto. Un último minuto en el que demostramos que el de ayer no era nuestro día. Perdimos un rebote crucial en defensa tras un tiro libre y después desperdiciamos la última posesión en un ataque en el que podríamos haber llevado el partido a la prórroga. 

Al final, justa victoria de los visitantes y varapalo inicial para nosotros. Mañana retomamos entrenamientos y el viernes jugamos en Melilla con el ánimo de mejorar y volver con la primera victoria en nuestro haber.

Departamento de Comunicación del Baloncesto Fuenlabrada. 

Foto de Alba Pacheco.